2007/09/03

> Iritzia: Ricardo Romanos > DE ENANOS, MARICONES Y ANARQUISTAS

  • De enanos, maricones y anarquistas
  • La Rioja, 2007-09-03 # Ricardo Romanos
Acabo de constituirme en Área de Libertad de Expresión Afectivo Sexual de Enanos, Maricones y Anarquistas en Peligro de Extinción gracias a la Conferencia Episcópica de IU. Me lo ha pedido desesperadamente La Golfa, un maricón y viejo amigo que se dedica a imitar folklóricas en ambientes de moral dudosa. La Golfa, o sea, don Manuel Heredia Pinillos, sale al escenario con sus faralaes maquillada como una mona desde hace cincuenta años, como La Pantoja pero en fetén, y saluda a la agreste concurrencia con voz cazallera: «Zeñora y zeñore, pa que no haya duda yo zoy maricónn. Pero maricónn, maricónn, maricónnn, ná de homozezuá ni guey ni zarandajah de marinerito en primera comunión: ¿Maricónnn!». Luego se arranca por Pastora Imperio para terminar invariablemente, chorretón de lacrimoso rimel hasta las siliconas, recitando 'El embargo' de Gabriel y Galán: «Señol jues, embargal los avíos, herramientah que no quedi una. Ya, ¿pa qué las quiero?». La otra noche en Sevilla le conté lo del Makoki (todo hay que decirlo, Heredia a sus 68 sigue siendo un platónico de la FAI) y le entró tal mala sangre que se mesaba el pelucón cual Moisés en una película de catequesis años 40. «Cabroneh, que zon peoreh que la conferensia pizcopá, que ya lo desía mi mare, eztoh te deharán zin pan resándole a Lenín con un sirio pahcual». El apoderado de La Golfa, don José Oriol Viciano, un enano valenciano afiliado a sus 70 a la CNT, estaba en el camerino de Heredia fumándose una breva murciana. Su voz atiplada se sumó melancólicamente a la desesperación ideológica de La Golfa: «A nosotros ya nos chafaron el negocio, cientos de años de negocio en teatros, circos y plazas de toros, ché. Porque salir a que nos viera la gente vestidos de bomberos atentaba contra nuestra dignidad. Ya no somos enanos, ché, ahora somos entes de baja estatura. Con mucha dignidad, eso sí, pero jodidos. Lo peor es que nos traicionó un judas enano, de izquierdas se decía el tontolaba, incitando a los ayuntamientos a que no contrataran nuestros espectáculos. A la mierda con su dignidad, que no se enteran». Y Heredia crucificó: «No ze enteran de ná, loh mu gilipoya, ¿a las barricadah, a los parapetoh, maricone der mundo, uníoh! Dile ar Makoki éze que como quite una letra ze va a enterá por mih cohone y que maricón el que no brinque y pol culo ze la hinquen». Así que aquí estoy, constituido en toda un Área Afectivo Sexual, adarga en ristre y galgo bujarrón, dando la serenata: «La Ramona es la más gorda de las fiestas de mi puebloooo ». A ver si se mosquea alguna priora sinsustancia de IU y pretende callarme la sin hueso por gordófobo, por atentar contra la dignidad de las señoras entraditas en carnes. Con lo que a mí me gustan desde una perspectiva caballera, Makoki

> Iritzia: Josebe Egia > ASIGNATURA BASICA

  • Asignatura básica
  • Gara, 2007-09-03 # Josebe Egia

¡Ya estoy aquí! Dispuesta a seguir Zirika zan(eando) desde este txoko y a enfrentarme a la cruda realidad, que la «cosa» no está para echar cohetes. No recibimos más que amenazas: en lo político, en lo social... y, para colmo, el euribor creciendo sin parar. Además, el comienzo del curso escolar, que trae de cabeza a las familias para llegar a fin de mes, aunque éste viene con una noticia que, si no se queda en un plan más sobre el papel, me parece que puede tener calado para mejorar la convivencia en el futuro.


La buena nueva es que en la CAPV 115 colegios de la red pública implantarán este curso un plan para atajar la violencia en las aulas, diseñado por el Departamento de Educación del Gobierno vasco. En los centros se crearan Observatorios de Convivencia. La meta, según Educación, es «construir unas relaciones en los centros educativos que se fundamenten en el respeto a la dignidad de todas las personas, basadas en valores como la paz, la convivencia, la tolerancia, la libertad, la solidaridad, la igualdad, la justicia y el respeto a los Derechos Humanos».


Hasta ahora las iniciativas formativas desarrolladas en esta línea desde el año 2000 no tenían carácter obligatorio y sólo eran algunos centros y parte del profesorado quienes se apuntaban a los cursos. El nuevo plan, en cambio, establece que todos los colegios de la red pública vasca deberán crear en el plazo de tres años estos Observatorios de Convivencia en los que, además del profesorado y el alumnado, se integren las madres y los padres. Aquí puede estar el talón de Aquiles que a ver como lo ataja Educación, porque quienes participan, cuando lo hacen, mayoritariamente son las madres, brillando los padres por su ausencia. De hecho, la queja mayor del profesorado, en Primaria y en Secundaria, es la dificultad para comunicarse con las familias.


Lástima que ese mismo Departamento haya tomado una decisión totalmente incongruente con el plan anterior. Ha enviado una recomendación a los institutos de Secundaria para que impartan la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía en segundo de la ESO, lo que pospone al curso 2008-2009 una materia que no es sino el complemento de su programa. ¡Ay, lo que influye la Iglesia católica española!


He leído los contenidos curriculares de Educación para la Ciudadanía y, francamente, creo que sus principios son básicos para desarrollar la convivencia y la cohesión social: el fomento de la tolerancia y el respeto al pluralismo, a la diversidad e interculturalidad; la igualdad radical de toda persona, el rechazo a la discriminación y la violencia hacia las mujeres, al racismo, la xenofobia o la homofobia...


En definitiva, asignatura básica que, además de en la escuela, habría que impartir a las y los políticos que van a impedir un alarde igualitario el día 8 en Hondarribia. Empezando por Borja Jáuregui y José Antonio Santano, alcaldes de Hondarribia e Irún respectivamente y principales responsables de la discriminación a las mujeres de sus pueblos.

> Berria: Merkataritza > LA CAMARA DE COMERCIO GAY Y LESBICA IBERICA ASESORARA SOBRE LAS OPORTUNIDADES DE NEGOCIO DEL COLECTIVO

  • La futura Cámara de Comercio Gay y Lésbica Ibérica asesorará sobre las oportunidades de negocio del colectivo en España
  • Base Financiera, 2007-09-03

La Cámara de Comercio Internacional Gay y Lésbica (IGLCC) presentó hoy en Barcelona la Cámara de Comercio Gay y Lésbica Ibérica, cuyos estatutos se aprobarán antes de fin de año y que, entre otros servicios, asesorará a empresas españolas, portuguesas y a

El nuevo organismo ibérico estará integrado por profesionales, ejecutivos y empresas de la Península Ibérica y por miembros corporativos que apoyen los principios de la Cámara. Tendrá sedes en Madrid, Barcelona y Lisboa y dispondrá de una antena de negocios en la capital andorrana.

Además, la Cámara de Comercio Gay y Lésbica Ibérica impulsará un Círculo de Economía y Negocios, que fomentará el debate sobre el papel de gays y lesbianas en la economía y promoverá la creación de asociaciones profesionales y empresariales, círculos de economía y agrupaciones por afinidad de personas gays y lesbianas en el mundo de la empresa.

Otros servicios de la Cámara serán programas de formación y consultoría sobre valorización de la diversidad en la empresa y las políticas de igualdad hacia gays y lesbianas, así como el 'coaching' a directivos gays, lesbianas y heterosexuales para superar prejuicios.

La Cámara Ibérica pretende trabajar con los departamentos de recursos humanos, marketing y comunicación, desarrollo de negocio y responsabilidad social corporativa (RSC) de las principales empresas españolas y desarrollará un Índice de Igualdad Corporativa, que medirá el grado de gay-friendliness (respeto a los derechos de gays y lesbianas) de una empresa.

Con los datos elaborará un ranking anual, en colaboración con la Asociación Europea de Managers Gays y Lesbianas (EGMA) y con la Cámara de Comercio Gay y Lésbica Internacional.

De hecho, la IGLCC creará una certificación internacional para las empresas de gays y lesbianas con el objetivo de permitir a las multinacionales implementar en Europa programas de diversidad y representatividad de proveedores, tal y como ya sucede en Estados Unidos.

La IGLCC cuenta con nueve países miembros: Estados Unidos, Canadá, Alemania, Francia, España, Suiza, Dinamarca, Austria y México, a los que durante la cumbre celebrada ayer y hoy en Barcelona se han sumado Reino Unido, Nueva Zelanda y Brasil.

En fin, que ya van veinte años o más de «mitos mal curados», como diría Sabina, y ya está bien.

> Berria: Trans > CHILE: UN JUEZ DE RANCAGUA FALLA A FAVOR DE UN HOMBRE TRANSEXUAL

  • Juez falla a favor de hombre transexual
  • OpusGay, 2007-09-03
El Primer Juzgado del Trabajo de Rancagua, falló la semana anterior que la Universidad Regional de Rancagua discriminó al profesor transexual, Andrés Rivera, al impedirle el año pasado ejercer su oficio, pese a existir inicialmente un contrato que fue conocido en enero del 2006 por altos representantes de la casa de estudios

En el dictamen del pasado 27 de agosto el juez Ricardo Araya Pérez sostuvo que "todos los indicios del proceso, la prueba rendida, el principio de la realidad y la sana crítica, permiten concluir que efectivamente el acto discriminatorio denunciado existió".

El magistrado agregó que "no puedo dejar de consignar, que siendo los actos de discriminación de suyo repudiables, resulta más repudiante aún cuando este proviene de una comunidad académica que debe de modo riguroso y crítico, contribuir a la tutela y al desarrollo de la dignidad humana".

Siguiendo la argumentación del abogado Cristián Orellana, quien presentó la demanda laboral el 15 de mayo del 2006, el fallo precisó que la Universidad al negar la prestación de servicios de Rivera, violentó al artículo 2 del Código del Trabajo, que prohíbe los actos discriminatorios, así como los artículos 5 y 19 de la Constitución política y el Convenio 111 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Rivera, quien es presidente de la Organización de Transexuales por la Dignidad de la Diversidad (OTD), precisó que las principales pruebas que le permitieron un fallo favorable fueron las declaraciones de la ex Jefa de la carrera de Educación Parvularia, Beatriz Jaña, y de la ex vice rectora de la Universidad, Virginia Catalán.

Ellas "fueron los testigos claves que presentamos al Tribunal, pues corroboraron que efectivamente me habían contratado para dictar la asignatura en la Universidad de Rancagua para el primer semestre del 2006", sostuvo Rivera.

Agregó que "este fallo es de suma importancia en la lucha que hemos dado como Organización de Hombres Transexuales, para el reconocimiento, la sensibilización y culturización sobre la temática transexual y mi lucha como activista de derechos humanos, por la dignidad y el respeto que merecemos todas y todo, sin distinción".

> Erreportajea: Komunitateak > ARGENTINA: BUENOS AIRES, CAPITAL GAY DE IBEROAMERICA

  • Buenos Aires, capital gay de Iberoamérica
  • Una cuarta parte de los visitantes de la ciudad argentina es homosexual  La tolerancia bonaerense, que se ha traducido en leyes para este colectivo, clave de esta «avalancha»
  • La Razón, 2007-09-03 # Angel Sastre · Buenos Aires

Algo tan básico como la tolerancia bonaerense se ha convertido en una de las razones de la avalancha de turismo rosa que ya abarca el 25 por ciento de los viajeros que llegan a la cuna de Borges.

El Estado ha sabido traducir la mentalidad argentina en leyes, con la aprobación, en diciembre del pasado año, de la Ley de Unión Civil que legaliza las uniones entre parejas del mismo sexo. Algunos beneficios que gozan quienes se unen por esta ley son compartir la obra social (seguro de salud) o acceder a un crédito. Esta norma rige únicamente en la ciudad de Buenos Aires, no en el resto del país.

César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA), explica a LA RAZÓN que aún quedan varias cosas por lograr: «Sobre todo, tener una ley nacional, no sólo de Buenos Aires».

Una de la madrugada de un viernes, la fila del Club Congo en el selecto barrio de Palermo supera las 30 personas. Hace frío en la capital y nos decantamos por otro local de diseño moderno. Se llama Chueca y desde la entrada se vislumbra tranquilidad. Sin embargo, unas escaleras nos llevan a un piso superior mucho más animado. El público mayoritariamente gay baila y se besa a ritmo de house.

Es fácil acabar en un boliche (bar) gay en la capital. La comunidad gay en Buenos Aires tiene vida propia con lugares específicos de reunión, siendo la Avenida Santa Fe y la Avenida Pueyrredón una de las zonas de encuentro más destacadas de la ciudad. Por sus calles resulta fácil encontrar grupos de chicos que se agolpan en los lugares emblemáticos sin conocerse. Después de encontrarse en estos puntos, anunciados en panfletos y mapas destinados a un público homosexual, entablan amistad y recorren juntos la capital.

Destinos no les faltan. Existe una gran cantidad de pubs, bares, restaurantes, cines, gimnasios y discotecas gays. Generalmente, los clubes abren sus puertas a la medianoche y la diversión se prolonga hasta la mañana siguiente, non-stop.

Aparte proliferan gran cantidad de lugares «gay-friendly», tolerantes con la comunidad homosexual, donde éstos pueden sentirse integrados y no discriminados por su condición. En las céntricas galerías de «Bond Street» hasta los tatuadores han sabido adaptarse.

«El te quiero Laura ha sido sustituido por el te amo Manuel», comenta Samuel, que regenta uno de los locales de tatuajes más conocidos en la galería. «Cada vez más chicos se tatúan nombres de hombres en su cuerpo. Muchos nos piden que les tatuemos los marineros que ilustran la publicidad del perfume de Jean Paul Gaultier, algo que por otro lado me parece muy grasa (hortera)», confiesa Samuel.

En el alojamiento también se percibe el cambio de la demanda. Sebastián regenta un hostal llamado Casa Buenos Aires. Aunque habitualmente el público gay prefiere lugares más costosos, Sebastián ha observado un incremento de sus huéspedes homosexuales.

David Cerdas, de Costa Rica, pasea de la mano con su novio porteño. Ambos sonríen mientras hacen sus compras en la Plaza Serrano: «Es un placer poder besar a mi novio cuando quiera, sin tener que mirar dónde lo hago», destaca.

El auge de parejas del mismo sexo también se ha experimentado en los Telos -albergues transitorios-, muy populares entre los jóvenes que eligen esta opción ante la falta de medios y casa propia. En este tipo de locales resulta posible alquilar habitaciones por tan sólo unas horas.

> Iritzia: Sergio Téllez-Pon > GAY, GUEI Y GAYS, ¿QUE ES LO CORRECTO?

  • Gay, guei y gays ¿qué es lo correcto?
  • La gran penetración de la cultura estadounidense en todas las restantes del orbe ha hecho creer a muchos que el término “gay” es un anglicismo referido a los homosexuales. Su utilización ha provocado una estandarización y esterilidad en su significado.
  • Anodis, 2007-09-03 # Sergio Téllez-Pon

En los últimos años el término “gay” se ha estandarizado en muchas sociedades para ya no llamar peyorativamente a los homosexuales. “Gay” está dentro de los términos de lo políticamente correcto que es tan propio de la vida moderna, por ejemplo, al implantar ese lenguaje a otros grupos vulnerables como los negros, los judíos, las mujeres y los indígenas. La hegemonía de la cultura estadounidense sobre muchas otras ha hecho creer, en este caso en específico, que la palabra gay es de origen anglosajón Así, para el común de la gente, “gay” describe un estilo de vida que ha creado, a su vez, una identidad estereotipada, un modelo al que se debe aspirar.


Sin embargo, gay es un concepto más amplio y de mayor antigüedad que el de simplemente homosexual. Este último es más bien una definición clínica y su utilización puede fecharse casi con precisión: desde 1869 cuando el médico alemán de origen húngaro, Kart Benker, lo inventó de la unión de los términos “homo” (igual, semejante) del griego y “sexus” del latín, hasta los años de la liberación sexual en el mundo a finales de los sesenta y principios de los setenta o en los primeros años de los ochenta, aproximadamente, con el surgimiento del sida. O, incluso, también podría fecharse su acta de defunción: el 17 de mayo de 1990, día en que la Organización Mundial de la Salud (OMS) sacó la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales. También, en otras épocas se adoptaron otros conceptos para nombrar a las personas que tienen sexo con otras personas de su mismo sexo –a los hombres en particular, por ser los más visibles–: “sodomita”, “somético” o “pederasta”.


La palabra “gay” como tal ha existido desde tiempos inmemoriales: tiene su raíz en el latín “gaudium” que significa “gozo” o “gozoso” (por ejemplo, desde tiempos de Wilde y hasta hace poco el adjetivo “gayly”, en inglés, mantenía esa correspondencia pues significada “alegre”, “festivo”). Hacia 1100, los occitanos, en la zona de sur de Francia (Tolosa es Toulusse en occitano), empezaron a usar, según el diccionario de Corominas, los vocablos “gai”, “jai”; más tarde los galorrománicos, en el norte, utilizaron el término “gayo”. Corominas supone que, dado que “gai” se empleaba en el sentido de gozo, probablemente se trate de una reducción de “gauy”. Gauy, se redujo a “gau” que es frecuente en el sentido de “gozo” y a partir del siglo XII se encuentra con el valor de “alegre”.


Esa voz occitana fue adoptada también por los provenzales (“gayoleiru”), quienes empezaron a utilizar la oración “gai saber” al estar originalmente asociada con el Consistòri del Gai Saber (1323) un libro de poesía trovadesca de los siglos XI y XII que recopilaron los occitanos y del cual seguramente Niestzche tuvo conocimiento para titular uno de sus libros como La gaya ciencia, es decir, que la poesía es la ciencia feliz, de gozo. Finalmente, pasó a la lengua gallego-portuguesa en las famosas Cantigas de amigo que, por ejemplo, Alfonso X El sabio llegó a escribir. Probablemente las raíces gai- y gau- sean indoeuropeas que de alguna forma se mantuvieron en el latín (“gaudium”) y que, a su vez, como puede verse, permaneció en el francés, catalán y gallego, e incluso en el inglés, pero se perdió en algún momento de la larga historia del español.


Después, con la liberación sexual de los años setenta del siglo XX el término “gay” (vocablo adoptado por el inglés, recuérdese) fue tomado para designar a una comunidad que exigía, con medios un tanto cuanto radicales, su derecho a pertenecer a la sociedad; sin embargo, como ya he dicho, ha devenido cierto estilo de vida: lo que algunos ya llamamos el “american gay of life”, es decir, se le ha atribuido casi exclusivamente a una actitud a lo que sencillamente era la definición de un comportamiento dinámico, alegre. De hecho, visto a la distancia, parece paradójico el movimiento gay haya alcanzado sus primeros objetivos al tener actualmente una entrada a esas instituciones de la sociedad a las que entonces combatió radicalmente. El cronista chileno Pedro Lemebel observa muy bien esto al hablar de las discotecas, recintos del máximo hedonismo: “Quizás, aunque la disco gay existe en Chile desde los setenta, y solamente en los ochenta se institucionaliza como escenario de la causa gay que produce el modelo Travolta sólo para hombres. Así, los templos homo-dance reúnen el gueto con más éxito que la militancia política, imponiendo estilos de vida y una filosofía del camuflaje viril que va uniformando, a través de la moda, la diversidad de las homosexualidades locales” (en Loco afán, Anagrama, 2000; el subrayado es mío).


De manera que “gay” bien podría ser una palabra de uso común en español (dado que viene del latín, así como el español es una lengua derivada de ella) sin necesidad de que la hayamos “tomado” del inglés, y tampoco habría por qué casteñanizarla —como lo hacen los españoles, principalmente— al escribir “guei”.


Todo lo anterior viene a colación porque me he encontrado con algún activista que suele usar y decir frecuente e impunemente *guei y con una revista, Homópolis, que altera los titulares de las notas que toma de anodis.com, al no mantener el plural de gay, y escribe, por ejemplo, “El miedo al sida entre los hombres gay” (Núm. 102, julio de 2007). Sobre esto último, recurro al Diccionario esencial de la Lengua española (Espasa Calpe, 2007), que contiene las modificaciones que habrá de tener la vigésima tercera edición del Diccionario de la Lengua española, y acepta el plural de gay, es decir, “gays”. Por lo tanto, es correcto decir y escribir: “El miedo al sida entre los hombres gays”. De lo contrario, es como si dijéramos y escribiéramos algo así como: “Los bar de la Zona rosa”, o “Los mejores restaurant de la Ciudad están en la Condesa”. Lo correcto es, claro, “bares” y “restaurantes”.


Por fortuna, ahora el término queer empieza a adquirir cierta relevancia en algunos círculos y a esa descripción, menos normativa, algunos ya nos apegamos.