- Culpa Uzbekistán a ONG por “promover” la homosexualidad
- La organización estadounidense PSI, que difunde los intereses de personas con orientaciones sexuales no ortodoxas, fue acusada por el gobierno uzbeko de promover la homosexualidad en la ex República Soviética.
- Anodis, 2007-03-05 # Andrés Lautaro
Hace unos días, el gobierno uzbeko dio señales de su intolerancia hacia gays y lesbianas cuando sus autoridades dijeron que la organización no gubernamental, Population Services International (PSI, por sus siglas en inglés), no tiene su documentación legal en regla y promueve un “estilo de vida homosexual” en esta ex República Soviética.
La revista Advocate publicó que voceros del gobierno local dijeron: “PSI es especialmente famosa por sus proyectos para promover los intereses de personas con orientaciones sexuales no ortodoxas” y recordó que la homosexualidad es ilegal en Uzbekistán, dónde se establecen penas de hasta tres años de prisión.
Además, el gobierno alegó que PSI, fundada en 1970, fue creada por el norteamericano Philip Harvey para promocionar el uso de anticonceptivos fabricados por la compañía Adam & Eve
Por su parte, y de acuerdo a información difundida en su sitio web, PSI afirma que sus miembros realizan actividades en más de 60 países en desarrollo con programas dirigidos a combatir la malaria y el VIH. En Uzbekistán, están desarrollando un proyecto destinado a prevenir las enfermedades de transmisión sexual.
Uzbekistán, así como su vecino Turkmenistán, son las únicas ex repúblicas soviéticas donde la legislación antigay de la época de Stalin aún sigue vigente. Y, según abogados de derechos humanos, los homosexuales de este país son frecuentemente identificados por los oficiales de la ley, quienes monitorean los sitios de Internet en los que navegan.
Chivos expiatorios
Hace unos años, el caso de Ruslan Sharipov, periodista y activista por los derechos humanos, puso al descubierto que el gobierno de este país utiliza muchas veces a los gays como chivos expiatorios para reprimir la libre expresión y/ o la disidencia política e ideológica.
Sharipov está en prisión acusado de “homosexualidad” y de “tener relaciones con un menor” según un juicio del año 2003, que de acuerdo a Amnistía Internacional fue celebrado “sin las debidas garantías de justicia procesal” y en el que Sharipov “se habría confesado culpable de los cargos que se le imputaban por coacción”. El acusado argumenta que lo encarcelaron debido a sus artículos críticos sobre el régimen del presidente Islam Karimov, quien gobierna dictatorialmente el país desde 1991, año en que se desintegró