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• Robert Biedron · Activista polaco de la Red contra la Homofobia
• «Envidio el reconocimiento social que disfrutan los homosexuales vascos»
• Defensor de la libertad sexual y líder polaco contra la homofobia, viene a Gipuzkoa a denunciar la campaña contra la homosexualidad que el gobierno promueve en su país
• El Diario Vasco, 2007-05-17 # Mikel Soro

La solidaridad de los homosexuales guipuzcoanos de [las asociaciones Bostaxola, EHGAM y Medeak] [1] con sus homónimos de Polonia se ha hecho patente en la presencia de Robert Biedron. Este polaco de la organización Red contra la homofobia, ha denunciado públicamente en Donostia, tras hacerlo en Bilbao y mañana en Pamplona, la marginación y hasta la violencia que sufren estos colectivos actualmente en su país. Hoy es el Día mundial contra la Homofobia.

- ¿Polonia ha pasado de ser un satélite soviético con ciertas libertades a ultraderechizarse?
- Polonia nunca ha tenido una sociedad con libertades. Ha sido unicultural y uniconfesional con el catolicismo dominante. Las minorías no tienen nada que ver con la imagen que Lech Walesa creó cuando luchó contra el comunismo desde el sindicato Solidaridad. La realidad es que la sociedad polaca no es tolerante. Ahora se está pagando por ello.

- ¿Viene al País Vasco a denunciarlo o a pedir ayuda? O a las dos cosas.
- La Unión Europea representa unos valores de tolerancia, diversidad y respeto a los derechos humanos. Se supone que cualquier país que se integre en la UE debe aceptar estos valores y derechos como propios. Polonia sólo dirige sus pasos a la integración económica. Lo social lo deja al margen. Corresponde, entonces, a los demás países consolidados dentro de Europa, presionar en Bruselas para velar por el pleno cumplimiento de todas las normas.

- Lo sorprendente es que sea el ministerio de Educación polaco quien presente una propuesta de ley homófoba...
- Refleja el gobierno de extrema derecha ultracatólica en Polonia. Si se aprueba, no puede haber profesores ni maestras homosexuales. Ni los alumnos, que deberán ser expulsados. Los responsables de los centros educativos donde se hable de sexo pueden no sólo ser apartados de sus cargos sino sufrir penas de prisión. Los hermanos Lech y Jaroslaw Kaczynski, que gobiernan Polonia, pretenden expandir su homofobia a otros países que aún no se han significado a favor de la igualdad social y los derechos de los homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales. Eso es lo que pretendo explicar aquí.

- ¿Incluso peligra la integridad física de los homosexuales polacos?
- Desafortunadamente sí. El gobierno hace una propaganda amplia de odio en contra de estos colectivos. Somos los enemigos de la nación y el primer ministro, Roman Giertych, nos llama en público anormales. El 80% de los gays y lesbianas polacos, que son dos millones de personas de una población de 40, no se atreve a decirlo públicamente. Un estudio publicado señala que el 18% de los homosexuales polacos ha sido agredido y de ese porcentaje, el 46% ha sido atacado en repetidas ocasiones. No hay comparaciones con otros colectivos.

- ¿Conoce la situación de los homosexuales vascos?
- Me da envidia comprobar el grado de integración en la sociedad. Sólo llevo aquí dos días y lo poco que conozco es lo que me han contado los miembros de Gehitu que vinieron en 2006 a Polonia a dar un seminario sobre el género, cerca de Cracovia. Me han explicado el reconocimiento social y las libertades que disfrutan. He visto que los políticos son respetuosos con estos colectivos. Esto mismo es impensable ahora en Polonia pero mi sueño es que mi país sea como Euskadi en el futuro. Pero hay que seguir trabajando y no bajar la guardia.

• Quién: Robert Biedron, polaco, [31] años.
• Qué: Graduado en Ciencias Sociales y Políticas, licenciado en Derechos Humanos y Doctorado en Humanidades. Consultor de Derechos Humanos. Autor del primer libro sobre la persecución de homosexuales polacos por parte de las tropas nazis. Fundador y presidente de la Campaña contra la Homofobia en Polonia.

• [1] Nota de EHGAM-DOK: En el original, erróneamente, figura la asociación Gehitu. Al día siguiente DV publicó la correspondiente fe de errores.