2007/04/03

> Erreportajea: Faxismoa > POLONIA SE AISLA DE LA UNION EUROPEA

  • Polonia se aísla de la UE
  • Los Kaczynski alientan el euroescepticismo frente a las injerencias de Bruselas
  • El País, 2007-04-03 # Cristina Galindo · Varsovia

Sólo es una carretera. Apenas unos cientos de kilómetros de asfalto que, pese a la negativa de Bruselas, Polonia desea construir en un paraíso protegido que atraviesa el valle de Rospuda, un bosque único del noreste del país. Pero esta autovía simboliza el bache sentimental que atraviesa Polonia en la UE. Su Gobierno, comandado por los gemelos conservadores Lech (presidente) y Jaroslaw (primer ministro) Kaczynski, se acerca al euroescepticismo y cada vez está tomando una postura más aislada dentro del club europeo. "Estamos perdiendo la oportunidad de desempeñar un papel importante", se lamenta Lena Kolarska-Bobinska, directora del Instituto de Asuntos Públicos y una de las analistas más reputadas de Varsovia.


Pese a ser un socio novato, el entusiasmo de Polonia por entregarse a las supuestas ventajas por las que ingresó en la Unión en mayo de 2004 ha durado poco. Desde entonces, ha sido un miembro incómodo que no está dispuesto a dejarse acobardar por los poderes tradicionales (Francia o Alemania). Fuentes oficiales en Varsovia responden que es legítimo defender los intereses del país y se comparan con la clase política de Reino Unido (cuna del no a Europa). "No hay problema alguno con Polonia, sino con su Gobierno", dice Kolarska-Bobinska. Casi el 80% está a favor de la integración, según las encuestas, y el 55% aprobaría la Constitución europea.


En los edificios oficiales de Varsovia no faltan las banderas europeas. En cualquier hogar de la capital, casi cualquier varsoviano expresa su alegría por pertenecer a la Unión. Se sienten más protegidos frente a Rusia (uno de los grandes fantasmas) y han recibido fondos comunitarios por 67.000 millones de euros.


Pero Polonia, más atlantista que europeísta, no siempre parece dispuesta a que le digan desde Bruselas qué es lo que hay que hacer. Ha resultado ser uno de los críticos más duros de la Constitución europea, se muestra reticente al euro y ve difícil cumplir el objetivo de que el 20% de la energía que consuma Europa proceda de energías renovables. En otros casos, hace oídos sordos a las advertencias (como el proyecto de la mencionada carretera, que Bruselas ha llevado a la Corte Europea de Justicia) y ha escandalizado con sus propuestas ultraconservadoras (prohibir "la propaganda homosexual" en las escuelas, el aborto y recuperar la pena de muerte).


En el foro europeo, donde la diplomacia y las maneras lo son casi todo, los Kaczynski están teniendo problemas para encajar. "Falta diplomacia y este Gobierno es incompetente en política exterior, porque no tiene a gente preparada", afirma Bartlomiej Ostrowski, de la Fundación Stefan Batory. "Pero es que tampoco la política exterior es su prioridad", puntualiza.


Escasez de expertos
El Gobierno de coalición -integrado por los derechistas y católicos Ley y Justicia (de los Kaczynski), la Liga de las Familias Polacas y Autodefensa, euroescépticos- se ha quedado sin expertos. Por dos razones: por una parte, el objetivo de limpiar la Administración de viejos comunistas ha privado al Estado de gente experimentada; por otra, muchos no se atreven a trabajar con los Kaczynski. "Tratan a todos como sospechosos en potencia", afirma Julia Pitera, diputada de la Plataforma Cívica, principal partido de la oposición (de derechas, pero mucho más liberal en lo económico).


"Están dañando la imagen del país; estamos perdiendo todo lo que ganamos desde 1989", asegura Krzysztof Bobinski, de la Fundación Unia & Polska, una organización proeuropea. Desde luego no mucho interés mostró la ministra de Finanzas, Zyta Gilowska, cuando hace un mes la Comisión reprendió a Varsovia por su excesivo déficit público. La ministra no estaba en la sala para aguantar el rapapolvo. Y a nadie le extrañó: desde que fue nombrada en septiembre pasado no había acudido ni a una sola reunión ministerial en Bruselas. Varsovia dice que la economía va bien. Crece a un ritmo superior al 5% y el paro se reduce, pero aún sigue siendo un 14,9% y miles de polacos buscan mejores salarios en otros países (casi tres millones han dejado Polonia desde 1989, cuando cayó el muro de Berlín, la mayoría jóvenes, para trabajar en Reino Unido e Irlanda; en España hay unos 50.000).


Los observadores opinan que el país, un gigante en la región de los Estados que estuvieron bajo el paraguas soviético, está destinado a ser un referente en la zona y una inspiración para otros vecinos más inestables (Ucrania). No es tarde, según Michal Komar, profesor de periodismo y colaborador de la revista Tygodnik Powszechny: "Hay que intentar buscar relaciones en Europa, construir una alianza y saber que hacerlo no nos privará de nuestra identidad nacional".


Los archivos comunistas
Todos los secretos de la antigua policía política polaca están guardados en un almacén a media hora en coche del centro de Varsovia. Carpetas y más carpetas con papeles de los que espiaron y los que fueron espiados durante los 40 años de dictadura, que si se pusieran en línea recta formarían una línea de 80 kilómetros. "Los polacos que sospechen que han sido víctimas del régimen pueden pedir su informe o el informe de otros, pero si lo fundamentan, y tienen que ser de personajes de la esfera pública, como los políticos", explica Andrzej Arseniuk, portavoz del Instituto de la Memoria Nacional, creado en 1999 para archivar esa documentación y perseguir los crímenes del comunismo.


El instituto es una de las herramientas utilizadas por los gemelos Kaczynski para llevar a cabo lo que muchos consideran una caza de brujas: sacar a la luz el nombre de los que colaboraron con los antiguos servicios secretos, sobre todo de los que actualmente ocupan puestos públicos. Desde que se creó el organismo (tiene 1.600 empleados), se han registrado unas 60.000 solicitudes para acceder a los archivos. Los que colaboraron con los espías comunistas son juzgados por los llamados tribunales de lustración. Hasta ahora ha habido 160 procesos, aunque se desconocen las condenas.

> Berria: Aktibismoa > DONOSTIA: CONCENTRACION CONTRA LA HOMOFOBIA EN POLONIA

  • España se manifiesta contra la homofobia en Polonia
  • Como consecuencia del accionar homofóbico y la preparación de una ley “anti gay” en Polonia, en San Sebastián, España, organizaciones lésbicas gay trans protestaron públicamente y exigieron detener la intolerancia.
  • AG Magazine, 2007-04-03 # © Manuel Velandia (textos y fotos) exclusivo para AG Magazine

En Polonia la vulneración de los derechos de gays, lesbianas y trans es un acto cotidiano; a ello hay que sumar, como es típico de un gobierno de derecha, que el gobierno está preparando un proyecto de ley que oficializará la persecución y el castigo a los maestros que declaren su orientación sexual y/o hablen del tema en las escuelas e incluso en las universidades.


Teniendo como eje de la acción la denuncia de esta posible vulneración a los más elementales derechos sexuales y humanos, un grupo de organizaciones entre ellas Ehgam (LGT), Medeak (lesbianas), Plazandreok (mujeres), ESK y CC.OO. (sindicalistas) y ZutiK (organización política) organizaron el pasado sábado 31 de marzo en San Sebastián, España, una demostración pública en la que se hicieron presentes más de 50 personas.


En la actividad, que se tomó la calle Boulevard que es la vía mas transitada de San Sebastián se vieron carteles escritos en polaco: «Contra la homofobia, contra el nuevo fascismo, Europa se ríe de vosotros. Derechos humanos para todos»; en euskara y español, en los que se leían frases como «Poloniako gobernuari: aski da! Giza eskubideak denontzat», «Gobierno polaco, basta ya. Homofobia, lesbofobia, transfobia, stop. Derechos humanos para todos».


Mikel Martin, representante de EHGAM, una de las organizaciones convocantes informó al respecto «Ya no se limitan a prohibir y reprimir las manifestaciones de gay, lesbianas y transexuales, sino que la persecución es total. Ahora pretenden ‘limpiar’ las escuelas de profesores homosexuales y además sancionar a cualquiera que hable de homosexualidad de manera positiva. Se trata, en definitiva, de institucionalizar la homofobia, la lesbofobia y la transfobia».


La protesta es una llamado a la Unión Europea que no puede permitir que uno de sus estados miembros promueva una legislación homófoba semejante. Los colectivos que realizaron la protesta calificaron de gravísimas las actuaciones del gobierno polaco en contra de los más elementales derechos de la ciudadanía: Para Mikel, «se está produciendo una auténtica caza de brujas, una persecución a quienes no comulgan con las ideas del gobierno ultraconservador».


Las organizaciones no gay presentes fueron enfáticas en su interés en acompañar con su solidaridad las luchas de los grupos de gay, lesbianas y transexuales de Polonia. Uno de los voceros presentes comentó «en Polonia, armados de valor los LGBT han salido a la calle y debemos mostrar nuestra solidaridad».


Las personas concentradas, a las que se unieron algunos transeúntes, se taparon las bocas con una cinta autoadhesiva, como lo hacen en Polonia, con el lema «Polonian homofobiari stop».

> Berria: Egoerak > NIGERIA: PODRIAN APLAZAR O ENTERAR EL PROYECTO DE LEY PARA AUMENTAR LAS PENAS POR HOMOSEXUALIDAD

  • Nigeria podría aplazar o enterrar su proyecto de ley para aumentar las penas por homosexualidad
  • Dos Manzanas, 2007-04-03

El proyecto de ley para aumentar las penas por homosexualidad en Nigeria podría ser aplazado o directamente enterrado, según publica la web de información gay Pink News. Los próximos 14 y 21 de abril se celebran elecciones en el país africano, y el proyecto habría quedado en un segundo plano, a la espera de la decisión por parte del nuevo Gobierno.


Desde el inicio de su trámite parlamentario, los planes nigerianos habían provocado críticas en todo el mundo, desde importantes asociaciones a grupos políticos, incluida una condena del Parlamento europeo.

> Berria: Hiesa > CUBA: PREVIENEN VIH-SIDA EN SALON DE BELLEZA PARA MUJERES

  • Cuba: previenen VIH/Sida en salón de belleza para mujeres
  • Peines, tijeras e información
  • CIMAC, 2007-04-03

Con la finalidad de prevenir las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) y el VIH/Sida, la cubana Leticia Santa Cruz Pérez fundó el primer salón de belleza en el mundo, Salud=Belleza Afrodita, donde además de procurar la apariencia física de las mujeres se les habla sobre estos padecimientos, informa Prensa Latina.


El Proyecto, con sede en La Habana, Cuba, consiste en atender de manera integral la salud y belleza de las mujeres cubanas, pues mientras las niñas, adolescentes y mujeres adultas esperan su turno para cortarse el cabello, reciben información sobre las ITS y el virus del Sida, mediante spots televisivos, revistas y pláticas con las estilistas, preparadas con información sobre sexualidad humana.


Las peluqueras y el personal de los salones aprendieron a utilizar otras herramientas de trabajo, además de peines y las tijeras, para convertirse en promotoras de salud, capaces de establecer una amplia comunicación con las usuarias, responder a preguntas generales sobre las ITS y el virus del Sida, y al final del día debatir acerca de la información recibida en un equipo de trabajo.


Salud=Belleza Afrodita inició con la aceptación de las mujeres de la comunidad, las cuales reciben un condón al entrar y un cartel del proyecto del Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (Unifem).


"La población lo ha recibido maravillosamente bien. Se ha estado diseñando desde hace 3 años; aún estamos a media máquina, pero era tanta la expectativa de la comunidad que tuvimos que abrir", mencionó entusiasta coordinadora del singular salón de belleza, Leticia Santa Cruz.


El proyecto funciona desde el pasado 14 de febrero, "escogimos el Día del Amor para fundar el centro porque es muy propicio para hablar de sexo y de enfermedades relacionadas con él", agregó.


"Sin condón ni pensarlo", es el lema de muchas de las cubanas que se han sumado a este denominado Proyecto Salud-Belleza Afrodita.


Aunado a la convicción de utilizar preservativo al ejercer su vida sexual, las mujeres involucradas han concluido que ser desconfiadas, es una actitud positiva que ayuda a prevenir las ITS y el VIH/Sida, ya que nadie está exento del contagio, "cuando más confiados estemos, es cuando más peligro corremos... Nunca podemos decir que no nos va a tocar", señaló Leticia Santa Cruz.


La recomendación de no confiar es porque a pesar de que se está haciendo un trabajo muy fuerte de prevención, no todas las personas se han sensibilizado con esto y no comprenden que es necesario protegerse.


Más adelante, se espera que el proyecto Salud=Belleza Afrodita incluya actividades culturales con grupos musicales, exposiciones, desfiles de modas que expresen la belleza del cuerpo humano y cine-debates, entre otras actividades afines al esparcimiento.


Debido a los buenos resultados de este peculiar salón de belleza, cuyo proyecto es auspiciado por el Centro Nacional de Prevención de las ITS VIH/Sida de Cuba, el Programa conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH Sida, la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Educación y la Cultura (Unesco), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y el Fondo Global, se piensa que podría extenderse a salones para hombres.


Asimismo, se ampliarán los temas a discutir en el salón de belleza, con la creación de programas sobre autoestima, violencia familiar, entre otros, afirmó Santa Cruz, concluye Prensa Latina.

> Berria: Telebista > CATALUNYA: "JOVENES VIOLENTOS", UN REPORTAJE QUE MUESTRA EL DIA A DIA DE ADOLESCENTES NEONAZIS

  • 'Jóvenes violentos': un reportaje que muestra el día a día de adolescentes neonazis
  • 20 Minutos, 2007-04-03 # Mario Serrano

‘Joves Violents' es un reportaje de la televisión autonómica catalana, TV3, elaborado por Albert Solé y Nuria Carné, que fue emitido hace unas fechas, y en el que muestra el día a día de varios jóvenes, algunos menores, simpatizantes de ideologías "políticas racistas y xenófobas".


"Mis enemigos son los del Espanyol (equipo de fútbol de 1ª División), mis enemigos son los del (Real) Madrid, mis enemigos son los punkies, mis enemigos son los moros, mis enemigos son los ‘guarros'", comienza diciendo Javier, uno de los jóvenes entrevistados, a la vez que las imágenes muestran a este mismo chico lanzando varias patadas y puñetazos al aire, como demostración de sus conocimientos de lucha.


Declaraciones contradictorias si se tiene en cuenta que el siguiente protagonista del reportaje, Óscar, otro joven de su edad, y con quien aquel mantiene amistad, dice ser seguidor del Espanyol.


"Nosotros sexo, alcohol, violencia y Espanyol", dice Óscar, quien más adelante amplía la lista de enemigos dada antes por su amigo Javier: "Negros, moros, yonkies (drogadictos), punkies, putas... depende, vagabundos". También entran los homosexuales, "la escoria de la sociedad, a quien no le importan las personas", como aseguran.


Entre en escena ‘La Juli', una joven de 15 años que quiere ser modelo y a quien le agrada la estética de los ‘skins', según se asegura en el reportaje. Entonces llega una declaración reveladora.


"Los ‘skins' no es que seamos violentos, es que... no sé, hemos... nos da rabia", asegura mientras también obsequia al espectador con patadas al aire a modo de exhibición de artes marciales.


¿Tienen claro lo que son?
El reportaje aclara que estos grupos juveniles no está organizados políticamente, y aunque les definen como nazis, no tienen muy claro lo que significa y más que nada, lo que les fascina es el lenguaje de la violencia.


No tienen mucho que hacer durante el día, sólo uno de los que forman la pandilla trabaja y el resto están buscando faena.


"Somos gente obrera todos", dice Juan, otro de los integrantes de este grupo, quien explica que algunos están buscando trabajo, otros ya lo tienen y otros están de baja. Javier, primer protagonista del reportaje, es el único de todos los jóvenes a los que se entrevista que procede de una familia ‘acomodada'.


Dinero no les falta, según el documental, y lo suelen gastar teléfonos móviles, pero también en otras de sus actividades, como son "beber cervezas, escuchar música Oi!, agruparnos en grupo (...) y si hay peleas, pues ir a por la gente que se mete con algunos de nuestros amigos", como detalla Juan. Estirpe Imperial y Nuevo Clan son algunos grupos que gustan de escuchar.


"Las canciones hablan de política, de fútbol (...) algunas incitan a la violencia", explica Javier.


"Yo soy facha"
"Yo soy facha más que nada, racista no, porque tampoco voy ahí mirando mal a los moros ni nada, a mi lo que gustaría es que España estuviese limpia", explica Juli. Acto seguido varios de sus amigos complementan, con nuevas razones, ese sentir xenófobo con afirmaciones de la talla de "notas que vas creciendo y lo vas notando dentro", "somos racistas", "mis ideas son de equipo de fútbol (...) por mi patria lo que fuera", "España limpia (...) sobran, nos quitan el trabajo", etc.


Tipología 'skin'
Además, otro de los testimonios aclara que hay muchas clases de ‘skins' y que hoy en día la estética del cabeza rapada está de moda. "Hoy todos quieren ser ‘skin' se rapa la cabeza, se compran una chaqueta y ya está, pero no tienen ideales", asegura uno de estos jóvenes, mientras que otro aclara que los mejores ‘skins' son los "nacional socialistas (nazis)".


El documental gira entonces hacia los ‘red skins' (de ideología comunista y/o anarquista), y busca en una de sus integrantes, Sandra, explicación al fenómeno ‘cabeza rapada': "Yo no soy como los cuatro, entre comillas, ‘pringados', que va de fachas y que portan la estética 'skin' cuando no lo son".


Por un lado, los 'skin' "nazis" defienden que no deben llevar ropa que les identifique, mientras que los 'skin' "rojos" visten con estética similar.


Una crisis adolescente
"Yo pienso que las bofetadas se las tiene que llevar por ella misma, yo le puedo decir muchas veces que está equivocada y ella sabe que muchas veces, aunque yo haya tenido razón, ella no me la ha querido dar", afirma Lourdes, madre de Juli, quien ve la situación de su hija como una "crisis de la adolescencia" sin alterarse en absoluto en sus declaraciones.


"Es una niña agraciada, tiene una voz impresionante, puede cantar, bailar (...) vale para muchísimas cosas y que no rinda y que se vaya con este tipo de gente me da muchísima pena por ella", prosigue Lourdes.


"¿Mi ideal de hombre? Que no sea 'skin' (...) con dinero, diferente, educado (...) que no traiga problemas como yo", dice Juli, sobre lo que espera en su vida sentimental futura, otra reflexión contradictoria dentro de las varias que realiza en el documental.


Vive rápido, muere joven
"Nosotros no vamos a llegar ni a los 30", concluye uno de estos 'jóvenes violentos'.

> Erreportajea: Egoerak > LITUANIA: UN SECRETO MEDIANAMENTE GAY

  • Lituania: un secreto medianamente gay
  • Deseosa de sacudirse el legado soviético y de plegarse a los estándares de la UE, Lituania se esfuerza por integrar a sus minorías. También las sexuales. Prensa, Iglesia y opinión pública arrastran los zapatos.
  • Café Babel, 2007-04-03 # Prune Antoine · Paris · Traducción: Elsa González Aimé

Vilnius. Temperatura exterior nocturna: -30º. Al fondo de un patio trasero sombrío y lúgubre, un tubo de neón brilla débilmente en el segundo piso de un inmueble. “Aquí es.” Eduardo Platovas señala con el dedo la ventana. Ni placa, ni signo aparente distinguen éste apartamento de los demás. Anonimato garantizado en hormigón armado.

Una vez al mes, los miembros de la comunidad homosexual de Vilnius, y de todo el país, se encuentran aquí, en la sede de la Lithuanian Gay league (LGL), para discutir de sus problemas con toda discreción. Los muros están pintados de amarillo chillón y hay algunos ordenadores diseminados por la sala. Esta noche, una quincena de personas asisten a una conferencia sobre homofobia, impartida por un profesor de la universidad Vytautas Magnus de Kaunas. Algunas imágenes desfilan sobre una pantalla, al ritmo del tic-tac incesante de un reloj. Encima de la chimenea encontramos la bandera multicolor del orgullo gay.

“En Lituania, los homosexuales tienen la costumbre de callar”, suelta Virginija, de 25 años, una de las asistentes al debate. “No hay sentimiento de pertenencia a una comunidad, porque nadie cree que la situación pueda cambiar”.

¿La situación? En éste pequeño Estado báltico, los gays siguen siendo una minoría invisible expuesta a las discriminaciones. Según una encuesta de la LGL con fecha de 2003, el 68% de los lituanos preferiría tener a un vecino camello antes que a un homosexual. Entre estos últimos, dos tercios temen desvelar su orientación sexual a su familia, y el 89% se muestra espantado ante la idea de que su jefe descubra sus preferencias.

Vivir escondido
Por lo que parece, el comunismo ha dejado su huella: en tiempos de Stalin, el sexo “no existía” y las relaciones entre personas del mismo género estaban castigadas como delito. Desde 1993, bajo la presión de Bruselas, Lituania flexibilizó su legislación. El gobierno muestra ahora su voluntad de combatir las discriminaciones. Un programa nacional de protección de las minorías fue puesto en marcha en 2003, y un mediador para la igualdad de oportunidades ha sido nombrado. La UE acaba de otorgar una partida de 150.000 euros para una serie de proyectos bautizados “Equal”, cuyo objetivo es integrar a las minorías en 2007. ¿Cuestión de tener buena conciencia?

“Claro está, los homosexuales no son maltratados, agredidos o arrastrados por las calles”, admite Mindaugas, el consejero legal de la asociación “Tolerant Youth Association” (TYA). “Sin embargo, las leyes que tienen por objeto proteger a las minorías sexuales no se aplican.” Es difícil, en efecto, lograr que se respeten unas medidas adoptadas en los trastornos de la post-transición y en contra de la opinión pública del momento.

“Nuestros políticos no se han atrevido a decir nada sobre la homosexualidad para no comprometer el proceso de integración europea”, añade Vladimir Simonko, uno de los fundadores de la LGL. “Pero una vez dentro del club, ya nadie duda en predicar un retorno a los valores tradicionales.” Según un sondeo publicado hace poco por el diario Reppublika, 100 diputados de los 140 de la Seimas, consideran la homosexualidad como una perversión. “¿Tolerar la homosexualidad? ¿Y por qué no aceptar la zoofilia también?”, habría llegado a declarar el parlamentario conservador Kazys Bobelis.

“Capones” y conservadores
A pesar de ello, Lituania no es el único país confrontado a un discurso retrógrado por parte de las autoridades. Entre las salidas de tono homófobas de los hermanos Kazcinsky en Varsovia, y los disturbios causados durante la Love Parade letona en el verano de 2006, cuando activistas de extrema derecha lanzaron huevos y excrementos sobre los manifestantes, los gays de las riberas del Báltico están lejos de ver la vida de color de rosa.

Para empeorar las cosas, la prensa local, compuesta principalmente por tabloides, multiplica las alusiones homófobas y los insultos escandalosos. Así, “capón” [vištgaidis] es el apodo abiertamente empleado desde las páginas del diario Vakaro zinios para designar a los homosexuales.

En cuanto a la Iglesia, con su aureola de “resistente” durante la era soviética, ve cómo su influencia se acrecienta sobre la clase política y sobre una población católica al 80%, en detrimento de cierta tolerancia. “Existe también en Lituania una especie de parálisis cultural”, reconoce el sociólogo Arnoldas Zdanevicius. “Los gays no logran salir del armario. Ninguna personalidad de primera plana ha dado nunca ejemplo, admitiendo en público su homosexualidad.” Apenas uno de los diseñadores más conocidos del país acaba de atreverse a mencionar en una entrevista una “orientación sexual cósmica”.

Gay de fin de semana
¿No estaríamos ante una falta de implicación por parte de la propia comunidad gay? “Tengo la impresión de que la mayoría de los homosexuales sólo quiere irse de fiesta”, retoma serenamente Virginija. “Ni hablar de un compromiso ideológico.” Porque en un país “tan provinciano”, todo se sabe muy rápido, demasiado rápido.

En la “Men’s factory”, el club gay abierto desde hace dos años en Vilnius por el ruso Alekseï Terenteï, los falos de cartón piedra brotan de las esquinas, los cuartos oscuros florecen y una ducha emana del centro de la pista de baile. ¿Cuál es la tarifa para divertirse a lo grande en esta fábrica de armas reconvertida en sala de fiestas? 40 litas [o sea, 20 euros]. Un precio caro que no impide la afluencia de unos 500 aficionados cada fin de semana, sin contar con las apariciones de famosetes rusos que “adoran el lugar”, según el propietario.

Rubio oxigenado de musculatura prominente, Terenteï se enorgullece de ser “el único homosexual oficial en Lituania”, antes de precisar “haber luchado sin descanso contra las instituciones o la policía” para afirmar su identidad. A su juicio, un garito como la “Men’s factory” hace más por la causa gay que todas las instituciones antidiscriminación del país. “Las asociaciones obtienen subvenciones, pero ¿dónde está el resultado tangible de su acción?”, lanza con una pizca de provocación.

Campañas de sensibilización, seminarios o debates son ciertamente organizados por la Lithuanian Gay League. Incluso la conferencia anual de la Asociación Internacional de los Gays y Lesbianas (ILGA) tendrá lugar en octubre de 2007 en Vilnius. A pesar de ello, los homosexuales lituanos siguen rechazando el movilizarse de forma demasiado ruidosa o el ser un “kamikaze”. Traducción: salir del armario.

“Hay una atomización de la comunidad gay y demasiadas divergencias entre los principales grupos de defensa de las minorías sexuales”, apunta Mindaugas. Como consecuencia, sus intereses están mal o poco representados. “Hace más de diez años que tratamos de defender los derechos de los gays y los cambios apenas se perciben: tal vez éramos demasiado idealistas”, se justifica suspirando Platovas, presidente de la LGL. “Las generaciones jóvenes no se interesan por los Derechos Humanos sino por el negocio.”