- Detienen al presunto asesino del cura, que se fugó en su coche
- Terra, 2007-07-17
Horas después de que se fugara en el coche de la víctima, un joven de 22 años de de nacionalidad rumana fue detenido en la Estación de Autobuses de Madrid por la Guardia Civil como presunto autor del asesinato del párroco de Villafranca que lo tenía acogido en su finca rural.
El cuerpo sin vida del sacerdote, de 75 años de edad, fue descubierto por un vecino de confianza sobre las 10 de la mañana de ayer, con varios golpes en la cabeza, a los pies de su cama en su domicilio de Villafranca, frente a su destino parroquial en la iglesia de Santa Marina de Aguas Santas. La Guardia Civil encargada del caso no descarta ninguna hipótesis, salvo la del robo. El párroco era propietario de varias fincas, algunas de ellas explotadas como salones de celebraciones y al parecer, era allí donde el ahora detenido trabajaba.
El cuerpo sin vida del sacerdote fue trasladado al mediodía de ayer al Instituto Anatómico Forense donde estaba previsto que se le realizara la autopsia. Familiares y amigos del párroco trasladen el féretro al Tanatorio de Córdoba, a lo largo de la mañana para su duelo. El entierro se celebrará a las 19 horas en su parroquia de Villafranca. El hallazgo del cadáver se produjo alrededor de las 10.30 horas de la mañana, cuando un feligrés de la hermandad de Jesús del Rescatado, Sebastián Serrano, persona de confianza del fallecido, encontró el cuerpo sin vida del sacerdote de Hinojosa del Duque. Según informó la Guardia Civil, el cuerpo se encontraba de rodillas, junto a la cama y con un fuerte golpe en la cabeza propinado con un radiador de aceite.
Tras encontrar el cadáver, Sebastián Serrano acudió de inmediato hasta el Ayuntamiento ubicado a escasos 20 metros del hogar del fallecido, donde pidió auxilio, 'y comenzamos a llamar a las fuerzas de seguridad', apuntó Francisco Palomares, primer teniente de alcalde de Villafranca de Córdoba, que justo antes de dirigirse al Consistorio, había compartido un café con Serrano.
Acto seguido, la Policía Local, la Guardia Civil, y más tarde la Policía Judicial se trasladaron hasta la casa del fallecido para recabar todos los datos para la investigación. Fue allí donde se peracataron de que no se encontraban las llaves del coche del sacerdote, un Toyota Corolla, y que a veces utilizaba el joven súbdito rumano.
Entonces, la Guardia Civil se dispuso a localizar al joven en la finca donde habitualmente residía sin dar con él. Tras la orden de detención a nivel nacional, sobre las 16.30 horas se localizó el vehículo en las inmediaciones de la Estación de Autobuses de Madrid, y fue sobre las 19.50 horas cuando fue detenido el presunto asesino de Tomás. Fuentes de la investigación indicaron que pese a la detención del súbdito rumano, los primeros indicios apuntan a que el móvil del homicidio no estaría relacionado con un robo, ya que la vivienda no parecía desordenada.
Golpes con un radiador
No obstante, tras las primeras diligencias, parece ser que el hombre falleció por los golpes recibidos con un radiador que también se encontró en el domicilio donde apareció el cadáver del párroco. Las mismas fuentes no confirmaron quien podría haber tenido motivos para ejecutar tal brutalidad.
En este sentido, los últimos días, los vecinos habían visto la presencia de un hombre, de procedencia rumana en la vivienda del fallecido. La solidaridad del párroco llegaba hasta acoger a quien necesitaba ayuda. Así, se pronunciaba Isabel Sánchez, vecina de la localidad, que últimamente, dijo 'lo he visto en el coche conduciendo con un rumano'.
Los trabajos de investigación policiales acabaron a las 14.20 horas, cuando el cadáver del párroco villafranqueño abandonó la vivienda y fue trasladado hasta la Funeraria Tanatorio de Córdoba. A continuación, la Corporación municipal celebró un pleno extraordinario de urgencia en el que se aprobó declarar dos días de luto a la memoria de Tomás Pérez Escudero, suspendiendo todas las actividades organizadas por el Ayuntamiento durante esos dos días; colocar las banderas a media hasta el señal de luto; declarar por escrito el pésame institucional al obispado y familiares, así como colocar esquelas en diferentes medios de comunicación.
Asimismo, el Obispado de Córdoba lamentó ayer el fallecimiento del sacerdote de Villafranca de Córdoba. Fuentes de la institución eclesiástica indicaron que la noticia de la muerte del sacerdote 'llena de tristeza a toda la Diócesis', que está pasando por unos momentos 'muy dolorosos'. Por su parte, el alcalde apuntó que 'nuestro amigo y párroco Tomás no merece menos', porque, continuó, 'siempre ha estado para Villafranca, especialmente, en la recuperación de su patrimonio y tradiciones'.
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